La costumbre más famosa de EEUU que hasta ellos mismos odian hacer

Si vas a viajar a EEUU, es crucial familiarizarte con las costumbres locales para evitar situaciones embarazosas. Los estadounidenses valoran enormemente la puntualidad y es considerado de mala educación llegar tarde sin previo aviso. Además, el desayuno americano es conocido por ser calórico y abundante. En contraste con otras culturas donde el almuerzo es la comida principal, los estadounidenses suelen consumir grandes cantidades de alimentos por la mañana, incluyendo bacon, huevos o waffles. Asimismo, los estadounidenses suelen tirar los restos de comida directamente al fregadero, gracias a trituradores de alimentos que evitan obstrucciones en las tuberías. Este método de manejo de desechos es común en muchas casas y refleja una actitud hacia la conveniencia y el uso eficiente de los recursos.

El patriotismo también es una característica notable de la cultura estadounidense. El 4 de julio, Día de la Independencia, es la celebración nacional por excelencia, donde se exhibe orgullosamente la bandera estadounidense en muchas casas y edificios públicos. En el ámbito educativo, la parada obligatoria para los autobuses escolares es una regla que todo el mundo respeta. Cuando un autobús escolar se detiene, levanta una señal de «stop» para que todos los vehículos se detengan y los niños puedan cruzar la calle de manera segura.  Los deportes también juegan un papel central en la vida estadounidense, con disciplinas como el baloncesto, el béisbol y el fútbol americano ocupando un lugar destacado. Estas son algunas de las costumbres estadounidenses más conocidas, pero también hay otra con la que debes familiarizarte antes de viajar al país y quizá no te guste tanto.

La costumbre de EEUU más odiada por todo el mundo

La historia de las propinas en Estados Unidos es compleja y arraigada en tradiciones que datan de la época posterior a la Guerra Civil. Originalmente derivadas de la práctica europea de dar «vails» o pequeños regalos a sirvientes, las propinas se adoptaron en Estados Unidos influenciadas por los viajeros que regresaban de Europa, especialmente durante la Edad Dorada.

A pesar de los intentos iniciales de oponerse a las propinas, especialmente en el período a principios del siglo XX, donde se consideraban contrarias a los valores democráticos y se intentaron prohibir en varios estados, las propinas finalmente prevalecieron. Para muchos empleadores, especialmente en sectores como la hostelería y el transporte, las propinas eran vistas como una forma de mantener los bajos salarios de los empleados.

La oposición a las propinas también incluyó críticas de que perpetuaban desigualdades raciales, ya que los trabajadores negros frecuentemente recibían menos propinas o eran rechazados por sureños blancos. A pesar de estos desafíos, las propinas se consolidaron y se legalizaron a nivel nacional en 1938 con la creación del salario mínimo, que incluía un mínimo separado y más bajo para los trabajadores que recibían propinas.

En Estados Unidos, el tema de las propinas es crucial y tiene normas no escritas bastante claras. En la mayoría de los restaurantes, una propina estándar puede alcanzar fácilmente el 25% del total de la cuenta. Es considerado aceptable dejar una propina del 15%, aunque algunos pueden considerarlo un poco escaso. Por otro lado, ofrecer una propina del 10% o menos puede ser visto como un gesto de poca consideración o incluso un insulto

Propinas alrededor del mundo

En los viajes internacionales, las propinas juegan un papel crucial. A menudo, se recomienda seguir la máxima de «donde fueres, haz lo que vieres». Por ejemplo, en Europa, las prácticas varían notablemente de un país a otro. En Alemania, es habitual dejar entre un 5% y un 10% del total de la cuenta como propina, entregada directamente al camarero si se paga en efectivo. En contraste, países como Dinamarca, Noruega y Suecia no tienen la costumbre de dar propina, ya que el servicio está incluido en los precios.

En Francia, normalmente ka propina está incluida en la factura bajo el término «Service Compris», que cubre un incremento del 15% destinado a los empleados del establecimiento. Sin embargo, muchos clientes eligen añadir un 5% al 10% adicional como reconocimiento por un servicio excepcional.

Por otro lado, en Canadá es habitual dejar alrededor del 15% de la cuenta como propina en restaurantes, mientras que en Estados Unidos la propina puede variar entre el 15% y el 20%, dependiendo del estado y del servicio recibido.  En América del Sur, en Argentina, las propinas suelen ser del 10% en restaurantes, mientras que en Brasil, el 10% ya viene incluido en la cuenta bajo el concepto de «serviço», aunque lo normal es dejar propinas adicionales a los camareros.

En Asia, las prácticas de propina varían considerablemente. En Japón, por ejemplo, no se acostumbra dejar propina, e incluso esta práctica se puede considerar ofensiva. En China, fuera de Hong Kong y Macao, las propinas no son comunes, aunque los guías turísticos suelen recibirlas. En India, es recomendable dejar alrededor del 10% de la cuenta como propina, especialmente en restaurantes y para los botones de los hoteles.